martes, mayo 30, 2006

Filmes de una cabeza (semi)inconsciente 9

Entré a casa de un tipo a sabotear algo, no sé qué ni por qué, pero tenía que hacerlo.
Entonces entré a un cuarto de la casa. En la pared detrás de mí había un espejo horizontal, largo y rectangular. Yo estaba de espaldas a él, pero me comencé a dar la vuelta. Apenas ví el borde del espejo noté que había alguien en él. Alguien dentro del espejo, que sólo estaba parado inmóvil. Observándome. No alcancé a ver quién era ni cómo era, porque apenas lo presentí yo me horroricé y le dí la espalda nuevamente.

Fue entonces que me desperté.

Me desperté, pero en seguida me llevé la mano a los ojos. Me los tapé. Tenía miedo, no quería ver nada. Entre mis dedos se filtraba luz, había algo al otro lado de mi mano. Pero yo estaba aterrorizado, fuera lo que fuera yo no lo quería ver. Intenté moverme, y solamente lo intenté porque no lo conseguí. Estaba paralizado. Quise llorar y llorar fuerte, pero tenía tanto miedo que ni siquiera eso pude hacer. Y entonces lo peor. Lentamente comenzaron a jalar mi sábana a un costado de mi cama, y a mí junto con ella. Me jalaban hacia el borde. No aguanté, me entró el pánico más grande que he sentido y comencé gritar. Pedí ayuda y llamé a mi hermano lo más fuerte que pude, pero nadie me ayudó. Todavía no sé si no me escucharon o nunca grité. Yo solamente pensaba que si mis pies salían del colchón yo me moriría ahí mismo. Y no sé cómo, al sentirme casi en la orilla pude encogerme. Me apreté en posición fetal, no sabía qué hacer y por mi desesperación me puse a rezar, no sé cómo podría ayudarme eso, pero me puse a rezar tanto que terminé por quedarme dormido nuevamente.

Nunca me quité la mano de los ojos.

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Éste es el post número 100.

Ésta es mi primera pesadilla después de más de 10 años.

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sábado, mayo 27, 2006

AA

El reloj de mi cuarto ya se echó a perder.

Y es que yo lo sé. Sé que ya no funciona. El corazón le dejó de andar. Pero siempre que lo veo está bien. Y yo sé que sólo me miente. Sólo es correcto cuando yo lo veo. Pero ya no funciona, yo lo sé. Porque ya no escucho el tic tac tic tac tic tac. Ya no lo escucho cuando duermo. Y de todos modos, cuando volteo está correcto. La hora exacta. Sólo me miente. Porque sabe que si me doy cuenta de que ya no funciona le arrancaré el corazón sulfatado. Lo echaré a mi cajón, junto con los demás que le he quitado. Y le pondré un corazón nuevo. Solamente para que me despierte molesto en las noches. Otra vez escuchando el tic tac tic tac tic tac.

miércoles, mayo 24, 2006

Hell yeah!

Let's get the Foucault of here.

Macanudeces

domingo, mayo 21, 2006

Soluciones sencillas, rápidas y (a veces) indoloras

Voy juntar un montón de basura y objetos de todo tipo, dejar que se pudran y esperar a ver qué sale de ahí. A lo que salga le llamaré Felicidad. Y por fin será más que una palabra.


Todos confiamos en la generación espontánea.

jueves, mayo 18, 2006

Imagenación

Untitled, Garry Winogrand (1950)

jueves, mayo 11, 2006

Filmes de una cabeza inconsciente 8

Estaba en el cuarto de lavado de mi casa, habían como 6 personas alrededor de la batea. Uno era un amigo, me le acerqué y le pregunté qué pasaba, me dijo que iban a ver si su papá todavía estaba vivo, porque lo habían enterrado por error creyendo que había muerto. Me dispuse a felicitar a mi amigo por Año Nuevo, pero me dijo que esperara a ver cómo estaba su papá. Se quitó su saco azul y me lo dió para que sostuviera. Entonces dos tipos empezaron a sacar un ataúd muy pequeño, como para un perro, de la batea. Lo sacaban con sogas y poleas hasta que lo dejaron en posición diagonal. No me fijé en qué momento, pero de repente el ataúd ya era de tamaño normal, para adulto. Entonces lo abrieron. Cayeron hielos y agua del interior. El hombre (que curiosamente, tenía un enorme parecido con Dalí) se encontraba inmóvil dentro de la caja. Pensamos que por fin sí había muerto. Entonces empezó a mover lentamente la cabeza y abrió la boca mínimamente. Los tipos lo ayudaron a bajar del cofre y él empezó a saludar a la gente. Mi amigo se volteó y me dijo: 'Ahora sí, Tapeton. Feliz Año Nuevo'.

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domingo, mayo 07, 2006

Macanudeces

Verdaderas tristezas 1

Los chistes de matemáticos son los que más me hacen reír, pero nunca nunca los entiendo.



Soy un matemático en potencia.

jueves, mayo 04, 2006

Las cosas no son lo que parecen (o Explorando mi refri)

Pero cómo me alegra comer algo que parece vómito pero que está sabrosísimo.



Todavía hay razones para esperanzarse.