miércoles, junio 28, 2006

Me sube la bilirrubina

En mi incansable búsqueda de renovación, interacción, innovación, indagación, investigación, discusión, retroalimentación, divagación y renovación he decidido entrar en el terreno de lo interactivo, para que este blog se convierta en un espacio de libre expresión y crítica indiscriminada que es lo que a todos les encanta, emociona y excita.

Hoy me encontré manejando en una avenida de la ciudad y ví algo que me resultó de lo más irritante... luego llegué a mi casa y al echarme a ver la televisión volví a ver algo igualmente molesto y aberrante.

- ¿Pero qué fue lo que viste?- dicen ustedes, sentados a mi alrededor, con sus ojos abiertos e iluminados por la maravillosidad de mi parábola.

En la calle ví un espectacular anunciando una conocida marca de agua purificada, en donde únicamente se aprecia un bebé sentado en... pues una sillita de bebé... y la imagen del garrafón de agua en un extremo de la imagen, todo esto sobre un fondo blanco. Arriba del bebé dice: 'A... ua!'.

Con la esperanza de que ustedes comprendan que yo no soy ningún pedofóbico o infanticida en potencia, simplemente se me hace una publicidad asquerosa, mamona y sin creatividad. Espero no estar afectando a alguien que haya dicho que éste es el anuncio más bonito que ha visto, pero le invito cordialmente a recapacitar y notar la basura que es (tanto el espectacular como usted mismo). Quizá lo que más me molesta es imaginar al "genio publicitario" diciendo:
- Vamos a poner a un bebé semidesnudo diciendo 'A... ua!' porque así es como le dicen los bebés! Ja, ja, ja.- y todos los directivos se reirían y repetirían 'A... ua... A... ua... sí es cierto! Ja, ja!', se estrecharían las manos y le darían millones de pesos al imbécil.

Luego en la televisión pasó un comercial de no sé qué chingados pero salía una chava que se duerme en el camión y empieza a roncar y hasta le hacen un close-up a su boca roncando y se meten en su panza o algo así y sale ella vestida de rata o algún otro roedor derribando edificios y gruñendo. Y luego la despiertan toda babeada.

No me acuerdo en realidad cómo iba ese comercial, pero me acuerdo que era irritante y creo que ni siquiera tiene que ver con el producto que anuncia, cosa que no me importa mucho y se puede utilizar muy bien de repente. Pero mejor para que intento dar una explicación que ni sé, yo lo odio y a alguien igual le dieron esos miles de dineros por hacerlo.

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Aquí es donde entran ustedes y éste post se hace interactivo.


-> ¿Cuál es el anuncio publicitario que más odia usted?




Nuestras operadoras están esperando, ilumine nuestras vidas con su líquido biliar.


P.D: Renovación estuvo dos veces por culpa del eco.

martes, junio 27, 2006

Macanudeces

sábado, junio 17, 2006

¿Por qué no soy deportista?

Cuando estaba chico pasé por todos los deportes, todos con grandiosas historias de gloria y desgracia (léase sin el 'gloria y'), que en su momento hicieron que determinara que no eran para mí.
Futbol, basquetbol, karate, tae kwon do, natación y unos cuantos más. Casi todos me han dejado marcado, literalmente. Pero hablemos de mi cicatriz de beisbol.
Tendría yo 6 ó 7 años, un tío puso un equipo de beisbol infantil y, después de haber fracasado en el futbol, mi papá pensó que el beisbol parecía prometedor. Y así fue como me encontré en el primer entrenamiento de beisbol de mi vida, resguardando vigorozamente la tercera base con mi guante, mi gorra, mi short y mis calcetines hasta la rodilla... o al menos, así debió ser. Y es que creo que dentro de una cancha era poca la diferencia entre un autista y yo, pues a un niño como lo fui no le bastaba más que el cielo para distraerse; así que mientras yo me encontraba en un magnífico desempeño deportivo con mi rostro volteándo hacia arriba, la pelota se desplazaba estrepitosamente en trayectoria lanzador-bate-mi cara, junto con un grito de advertencia en el último momento que captó mi atención y permitiendo a la pelota estrellarse con toda estrepitosidad en mi boca. Sangre y llanto. Fin de mi carrera beisbolística.

Recuento de los daños: No hubo pérdida de dientes ni daño visible, solamente una apenas perceptible cicatriz en la parte trasera de mi labio superior y la burla colectiva de que a mí me pareció un cielo demasiado azul.

¿Por qué no soy deportista?


Tengo suficientes cicatrices.

viernes, junio 09, 2006

Me convierto en zombie (o Ni sé por qué me molesto, yo seguramente termino siendo pobre)

Fin de semestre y yo estrenándome en eso de la Responsabilidad, tengo mi tiempo medido exacto entre estudio y trabajos... en realidad, es primera vez en la carrera que me siento como un 'estudiante'. Pero eso significa que hace 4 días que no duermo en mi casa y por consiguiente no he podido postear. Se solicita paciencia, unos cuantos días más y todo habrá terminado. Por ahora, les dejo un estúpido. Gracias.

Un Estúpido.


P.D: Sí, yo posteo cuando estoy dormido.