Verdaderas tristezas 2
Yo le decía que no se preocupara, que yo ya estaba bien. Y por eso nunca posteé algo sobre ella, porque era probable que ella entraría al blog, lo leería y vería que yo le mentí.
Pero en fin, nunca entró.
por obra y gracia del tapetazo @ 12:54 a.m.
6 veces te engañé
6 Comments:
waiiii, mmm me gusto pero igual me dolio, es feo que eso pase, ahora yo no puedo postaer hacerca de unas cosas porque una amigo que es amigo de una persona lee el blog asi que pus ni modo.
saludos cuidece:)
este comment es sobre el post de los anuncios publicitarios:
"iwal odio el "espectacular" (ke de eso no tiene nada) del bebé y el agua purificada.. pero NOSE donde lei que asociar productos, en este caso los garrafones, con bebés es simbolo de que los garrafones son tan limpios y tan higienicos como los biberones de los bebes.... digamos que poner un bebe en un anuncio le aumenta "credibilidad" al producto.. pero bueno...
el anuncio no me gusta."
ey... te lo trajiste!
tenemos que autocensurarnos en nuestro blog... es triste... a mi igual me pasa...
Escuche una vez por ahí, entre los bullicios de mi cabeza estrofiada que los sinsabores de hoy, son los grandes sabores del mañana...¡Prometo que no leí a Paulo Coelho!.
-¿¿Y otra vez benditas vacaciones??-
CC & DC: Esos amigos de los amigos... siempre metiéndose donde no les llaman... de hecho, así llegó usted aquí jeje...
Tío Bob: Sí, igual yo había escuchado eso... pero mando al diablo toda la semiótica, el anuncio es horrendo. Deberíamos unirnos todos con antorchas y coas y destruir todo el imperio del agua purificada (yo tomo Electropura, esa no me la toquen). Bienvenido.
Sirena: Sí, me lo traje... ví el momento y me apresuré antes de que se fuera, soy de esos que les molesta tener posts en borrador...
Trako: Muy triste, y cuando uno no se censura luego se arrepiente... eso es más triste.
Sir Hache: Ya sabía yo que ese Once Minutos no era de tu tía! Mi Club de la Turba Iracunda tiene otro destino... (claro que permitiremos que salves tu pequeña colección borgiana, tampoco queremos hacer algo sacrilegioso).
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