lunes, noviembre 07, 2005

En realidad estaría flotando

Me compré una libreta para escribir.

Nunca he tenido el hábito de escribir y siempre he querido hacerlo. Pero sé que no lo voy a hacer, todavía no me atrevo a hacerlo.

Ya puse esta libreta al lado de mi cama. No es para escribir lo que pienso, es para escribir lo que sueño.

Mis sueños son tan personales, tan incoherentes y caóticos. Me gustan tanto. A veces recuerdo suficiente como para hacer un largometraje completo, a veces solamente unas cuantas cosas, otras sólo imágenes fijas e incluso únicamente una frase sin imagen. Pero la mayoría mueren después de un corto tiempo de consciencia. Detesto eso.

Ahora tengo mi libreta a un lado de la cama. Esperemos que estando medio inconsciente yo sea más valiente.

3 Comments:

At noviembre 07, 2005 3:36 a.m., Blogger Gran Fornicador said...

Es el primer paso. En una de esas va a estar usted tan dormido que ni se va a acordar que no se atreve a escribir, y va a empezar. Iba a contar muchos sueños locos que he tenido, pero tengo flojera, así que los voy a ir poniendo conforme me acuerde (solo los menos obscenos). Ah, y hablando de eso, también se puede usar la libreta para hacerse correcciones de estilo durante el acto sexual, pa que no se vayan a olvidar después, o bien, para escribir breves cartas obscenas a la chica en turno (claro que eso exige mucha coordinación, concentración, creatividad y aguante).

 
At noviembre 08, 2005 1:53 a.m., Blogger Sofía said...

Ay tapetazo, qué vergüenza con usted. Ya está el link de regreso, pero todavía no tiene imagencita. Ya llegará.

Las libretas funcionan. Nomás no vaya a entrar alguien y lea que soñaste con una batalla de zombies arios contra zombis negros y luego crea que estás en drogas. Pon un mensaje de advertencia en la primera hoja.

Ese consejo te doy, porque

 
At noviembre 10, 2005 1:57 a.m., Anonymous Anónimo said...

GF: Además de que uno nunca sabe cuándo una libreta puede convertirse en un fetiche. Es mejor estar preparados.

Sofía: En realidad, tomé muy muy en cuenta la advertencia en la primera hoja, pero para que las generaciones futuras que encuentren mi libreta en el estómago de una ballena (porque dentro de unos años la gente medirá 46 metros, obviamente) sepan cual es la verdad detrás de todo lo que contiene... y vean que no estaba drogado, solo semimuerto.

Y ese final tan abrupto solamente me intriga y me hace suponer que a usted le pudo haber pasado algo muy muy malo... como una combustión espontánea o no haber alcanzado al señor de los kibis.


P.D: Pensándolo mejor, no quiero una libreta como fetiche. Siempre me corto con el papel y no quiero accidentes.

 

Publicar un comentario

<< Home